Fonte: google
Também é desconsiderar que a análise da geografia do riquíssimo território brasileiro pode ser feita por infinitos enfoques e escalas dentro das regiões, dos estados, territórios municipais e até no interior dos bairros de cada cidade. Entre as diversas facetas analíticas citam-se o nível de desenvolvimento social e econômico, de politização, a dependência ou não dos eleitores aos programas assistenciais (bolsa família etc.), o grau de reação às notícias dos escândalos na gestão do dinheiro público, entre outras.
Portanto, não é sensato recriminar a conduta daqueles que exerceram seu direito democrático de escolha de um candidato, mas tem-se o dever de refletir sobre o gigantesco território brasileiro cheio de problemas e conflitos a exigir soluções eficazes.
Também é imperioso meditar sobre a competência dos candidatos tradicionais para resolvê-los. E os motivos dessas reflexões são simples. Nem sempre se tem candidatos qualificados em razão de os quadros partidários geralmente serem controlados por “donos de partido” e menos de meio por cento (o,5%) do eleitorado em média nacional.
É esse modelo institucional, precário e ilegítimo de voto, predominante no Brasil, que realiza convenções para indicar e aprovar os candidatos às eleições.
Texto en español:
Decir que el resultado del segundo período de votación de las elecciones presidenciales en Brasil mostró división del país en dos, una rica (Centro Oeste / Sur / Sudeste) y pobres (Norte / Noreste) ignora varios factores clave de las elecciones. Es decir, la complejidad del proceso y de los votantes, la decisión electoral debido a la formación de los ciudadanos, la ventaja de la candidatura a la reelección en disputa; las promesas, acuerdos y las maniobras políticas partidistas de las partes contendientes y el número de votos obtenidos por ambos candidatos en todos los estados de la Federación.
También no se considera que el análisis de la rica geografía de Brasil puede hacerse mediante enfoques y escalas interminables dentro de las regiones, los estados, los territórios municipales e incluso dentro de los barrios de cada ciudad. Entre los diversos aspectos analíticos citados fueron el nivel de desarrollo social y económico, de la politización, la dependencia o no de los votantes a los programas de asistencia social (subsidio familiar etc.), el grado de reacción a las noticias de escándalos en la gestión del dinero público, entre otros.
Así que no es sabio a culpar a la conducta de los que ejercieron su derecho democrático de elegir a un candidato, sino que tiene el deber de reflexionar sobre el enorme territorio brasileño lleno de problemas y conflictos que requieren soluciones eficaces.
También es imprescindible para meditar sobre el poder de los candidatos tradicionales para resolverlos. Y las razones de esas reflexiones son simples. No siempre hay candidatos calificados debido a los cuadros del partido están controlados generalmente por los "dueños del partido" y menos de medio por ciento (0,5%) del electorado en la media nacional. Ese modelo institucional precario y ilegítimo de voto, predominante en Brasil, que decide en la convención para indicar y aprobar los candidatos a las elecciones.
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